-
50
Pues sí: a lo tonto acabo de cumplir cincuenta y nunca, que yo recuerde, he dejado de ser miope, torpe, ansioso y puntual. Nunca he tenido un millón de euros. Ni un chalé en la Moraleja. Nunca he tenido abdominales de gimnasio. Nunca he sido mordido por un vampiro. Nunca he sido abducido por los…